Siempre hay lugar para conseguir un grado más de exclusividad y éste es un ejemplo. Peugeot Argentina lanzó una edición especial de la cupé RCZ compuesta por 60 unidades. Se llama Carbon Concept y viene para posicionarse en lo más alto de la gama de este deportivo que comercializó 400 unidades desde su presentación en enero de 2011. Está claro que este modelo es una de las armas de Peugeot para mostrarse como una marca diferenciada dentro de las generalistas. Diferente por donde se lo mire, es difícil pasar inadvertido a bordo de este modelo que aunque tenga similitudes con el Audi TT, tiene identidad propia. Esta serie especial le agrega elegancia y deportividad, con un techo en carbono brillante construido e inspirado en la tecnología del mundo de la competición. Además de representar innovación aporta un plus para una silueta de lo más atractiva, que cuenta con las carcasas de los espejos cubiertas por un tono similar al del techo. Las llantas de 18 pulgadas de esta edición también tienen un diseño específico con la cara externa en color aluminio y la interna en gris mate oscuro, calzadas con neumáticos 235/45 R18. El parante símil metal arqueado que va desde la base del parabrisas hasta el comienzo del baúl es uno de los detalles más destacados de una silueta que apela esencialmente a las curvas. Cuando este modelo aún estaba en etapa de prototipo, parecía inviable que el techo con el doble abultamiento estuviese de serie; sin embargo, Peugeot lo hizo y es para destacar, ya que el costo del desarrollo de esa pieza fue elevadísimo

Confort y seguridad
En su imagen externa está la mayor parte de la furia de este deportivo, porque ya en su interior se percibe el confort y la comodidad de cualquier sedán alta gama. Quien se sube a este tipo de vehículos sabe de antemano que para acceder deberá encorvarse más de lo normal, que la posición de manejo es muy baja, a pesar de que sus butacas deportivas se regulan eléctricamente y cuentan con buenas sujeciones laterales.
Los detalles diferenciadores de esta edición limitada remiten a los apliques de cuero un nombre

"Fisson", mientras que los tapizados de las butacas son de cuero gris claro, que cubre además los paneles de puertas y la plancha de a bordo. El panel de instrumentos mantiene la línea de otros modelos de la marca. No es para criticar, pero sí para comentar que puede caer algo chocante a la estética del habitáculo el hecho de utilizar para esta cupé el mismo comando de instrumentos, especialmente los unidos a la columna de dirección, que lleva, por ejemplo, un 207 Compact. Y no va por la calidad, sino por la estandarización de algunos elementos que para este RCZ podrían ser exclusivos. Como lo es el techo. En cuanto al equipamiento de confort, se destacan los tapizados de cuero; las butacas calefaccionadas; el climatizador automático de dos zonas; equipo de audio con MP3 y CD, Bluetooth, entrada auxiliar y puerto USB; control crucero; sensores de estacionamiento delanteros y traseros; y volante regulable en altura y profundidad, entre otros. En materia de seguridad incluye frenos ABS con repartidor de presión; airbags frontales y laterales; ganchos Isofix; control de presión de neumáticos; control de tracción y estabilidad; ayuda al arranque en pendientes; faros de xenón direccionales; y cierre automático de puertas en rodaje.

marchas, es un motor que permite salidas rápidas, disponer de una excelente elasticidad y sentir que siempre tendrá una respuesta al pedido del acelerador. Este propulsor le permite al RCZ llegarde 0 a 100 km/h en 7,6 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 237 km/h. Además, a contramano de lo que sucede con la mayoría de los deportivos, logra buenos valores de consumo, ya que a 130 km/h, marcha a 3.500 revoluciones por minuto y recorre los 10 kilómetros con 8 litros de combustible. Las relaciones de las seis marchas le sientan bien a los 200 CV, aunque por tratarse de un sport, las más bajas son algo cortas. Lo más destacado de la caja es lo relajado del régimen del motor a velocidades máximas legales. Desde el habitáculo se recibe un ronroneo agradable y particular; eso se debe a que los ingenieros idearon una membrana que vibra al entrar en contacto con el aire de admisión. Este original dispositivo se denomina Sound System. El chasis extremadamente rígido y el reglaje duro de las suspensiones le otorgan un buen comportamiento dinámico, y así lo demostró cuando lo exigimos a fondo. Afortunadamente, esa dureza no se convierte en una tortura a la hora de circular por la ciudad, en gran medida por lo bien que absorbe las imperfecciones. Y en eso mucho tienen que ver los neumáticos, que no tienen un perfil tan bajo. Aunque hay que tener cuidado con los lomos y cunetas por su escaso despeje. Por otra parte, el RCZ no mostró ningún vicio, y cuando quiso irse de trompa, siempre estuvo presente el control de estabilidad activando todos los sistemas de seguridad para corregir la trayectoria.

Conclusión
En síntesis, el RCZ es un deportivo en esencia, con una imagen fuerte, atractiva, y un andar equilibrado entre la rabia que se le puede pedir a una cupé de 200 CV y el confort de marcha que se puede buscar en un sedán de esa potencia. Esta edición limitada, que se comercializa a un precio de 264.130 pesos con una garantía de tres años o 100.000 kilómetros, se ofrece en cuatro colores. A los ya conocidos Blas Nacré, Negro Perla y Gris Sidobre en RCZ, se suma el nuevo Gris Haria.

Comportamiento deportivo
En esta edición especial no hay cambios mecánicos, mantiene el naftero de cuatro cilindros sobrealimentado, 1.6 litros de 16 válvulas y 200 caballos de fuerza. Un propulsor desarrollado con el Grupo BMW. Asociado a una caja manual de seis